Derbi catalán para empezar el año. Los jugadores de Míchel visitan el RCDE Stadium con el objetivo de seguir por el buen camino y volver a sumar tres puntos en un estadio en el que se llevaron la victoria en las tres visitas que realizaron. Enfrente se encontrarán a un Espanyol que no ha tenido el inicio de temporada deseado, y que con trece puntos ocupa plazas de descenso. Sin embargo, la vuelta al trabajo de los blanquiazules ha dejado buenas sensaciones, con un meritorio empate en el campo del Barça y una victoria ante el Celta que les ha permitido seguir avanzando en la Copa del Rey.
Al frente de la escuadra está Diego Martínez. Con un bagaje excelente en Granada, donde ascendió el equipo al máximo nivel y llegó a clasificarlo para competiciones europeas, el preparador andaluz se ha estrenado este curso en el banquillo de Cornellà-El Prat, y poco a poco trata de implementar una idea que se vertebra a través de un juego práctico y vertical. La seguridad defensiva ha sido uno de los principales problemas en estos primeros meses y, aunque han logrado resultados importantes en campos complicados, todavía encadenan seis jornadas sin ganar y llegan a la cita necesitados de reacción. Joselu, con ocho goles en quince partidos, se ha erigido en la máxima amenaza en un conjunto que cuenta también con el talento de Sergi Darder o Edu Expósito, la experiencia de Cabrera o Keidi Bare y el olfato goleador de Braitwhaite.
Espanyol y Girona se han visto las caras en hasta seis ocasiones, con un balance favorable a los rojiblancos de cuatro victorias, mientras que nunca han empatado. Las dos últimas, en Segunda, se saldaron con triunfo gerundense, mientras en las cuatro anteriores en Primera siempre se impuso el conjunto que ejercía como visitante. Una dinámica que tratarán de mantener hoy a los de Míchel para seguir dando pasos hacia el objetivo.
