Tras las dos derrotas en tierras andaluzas, vuelve la Liga a Montilivi y el Girona buscará recuperar las buenas sensaciones que dejaron los últimos partidos en casa. El conjunto gran canario, que consiguió la primera victoria de la temporada el pasado fin de semana contra el Sporting (1-0), suma seis puntos. Hasta entonces habían jugado cinco partidos con tres empates y dos derrotas, y con siete goles encajados por sólo tres anotados. Todos ellos del delantero referencia, Rubén Castro, que el año pasado ya anotó quince y es una garantía y también una amenaza en ataque. Su veteranía contrasta con la juventud de Pedri, de 16 años, una de las jóvenes promesas del club, que este verano ha fichado por el Barça pero, mediante cesión, ha seguido vistiendo de amarillo. Suyo fue el último gol de los canarios en la victoria de la última jornada, precisamente en el primer partido sin el citado Rubén Castro, que deberá pasar por el quirófano y se perderá los próximos dos meses.
Pepe Mel dirige el equipo desde el pasado mes de abril, cuando entró en sustitución de Paco Herrera. El conjunto gran canario construyó un proyecto muy ambicioso el curso pasado para recuperar la Primera División de inmediato, pero no pudo satisfacer los objetivos y terminó en media tabla. Este verano ha tenido que ajustar la plantilla para adaptarse al nuevo presupuesto, y ha sufrido bajas de piezas importantes como la del centrocampista David Timor. No obstante, también se han reforzado con jugadores destacados, como Mantovani, que vuelve de cesión; Drolé, un extremo de Costa de Marfil proveniente del fútbol turco que aporta imprevisibilidad por la banda o Jonathan Viera, que después de una aventura en el extranjero vuelve para dotar de magia la medular de los de Pepe Mel pero que aún no ha podido debutar. Además, cuenta también en sus filas con futbolistas de renombre dentro de la categoría como el lateral De La Bella o el centrocampista Ruiz de Galarreta. A partir de la calidad, y sobre todo también de la intensidad, los de Gran Canaria han intentado conformar un conjunto que sea capaz de plantar cara y competir contra todos los equipos de la categoría.
Las Palmas ha sido muy castigado en este inicio de temporada por las lesiones. Además de Rubén Castro también han perdido el portero habitual Raúl Fernández, el centrocampista Mikel Mesa y los delanteros Sergio Araújo y Benito Ramírez. Es por eso que Pepe Mel ha tenido que recurrir con frecuencia al filial para completar las convocatorias de un Las Palmas que la última vez que visitó Montilivi, en el año del debut en Primera, encajó un 6-0 en un partido donde el keniano Michael Olunga anotó el único hat-trick rojiblanco en la máxima categoría. El balance de enfrentamientos entre ambos equipos, sin embargo, es ligeramente favorable a los canarios, que se han impuesto en seis de los últimos once encuentros, por un empate y cuatro victorias de los gerundenses.
