Montilivi vivirá este sábado uno de los partidos más destacados de la temporada, el derbi catalán contra el Espanyol, uno de los equipos que más le cuesta puntuar como visitante. Los barceloneses hace cinco meses que no ganan a domicilio, y con tan sólo 9 puntos de 45 posibles se han convertido en el peor visitante de la categoría. Lejos de Cornellà sólo han ganado un partido, contra el Huesca, por seis empates y ocho derrotas, y acumulan diez consecutivos sin conseguir los tres puntos. El último tropiezo fue el sábado contra el Barça (2-0).
En el banquillo blanquiazul se sienta un viejo conocido de la parroquia gerundense, Francesc Ferrer "Rubi". El técnico de Vilassar de Mar se hizo cargo de la escuadra "perica" en verano, pero después de un inicio prometedor donde llegó a llevar al equipo a coliderar la clasificación de Primera junto con el Barça, una mala racha de resultados a partir del mes de noviembre (13 puntos de los últimos 54) le ha hecho caer hasta la parte media de la tabla. Rubi es un entrenador con una propuesta valiente y asociativa basada en el juego de posición, y que a partir del 4-3-3 intenta que sus equipos superen líneas con el balón y sean protagonistas mediante planteamientos ofensivos. Sin embargo, los blanquiazules se han convertido en uno de los conjuntos más goleados y también menos goleadores de la categoría, y sólo han dejado la portería a cero en uno de los últimos diez partidos. El gol está poco repartido, y lo capitaliza Borja Iglesias, que se ha erigido en el jugador más determinante en ataque con once dianas. Otra de las amenazas visitantes es Wu Lei. El futbolista chino, uno de los delanteros estrella de su país, llegó al RCDE Stadium en enero procedente del Shanghai SIPG, y se ha convertido en el primer futbolista de su nacionalidad en marcar en la liga española.
El enfrentamiento del sábado será el cuarto oficial que se dispute entre Girona y Espanyol a lo largo de la historia, con un balance favorable para los rojiblancos de dos victorias y una derrota. Los hombres de Eusebio Sacristán tendrán este fin de semana la oportunidad de vencer al Espanyol en Montilivi por primera vez en liga después de que el año pasado dos goles de Gerard Moreno lo impidieran. El resultado de la primera vuelta en Cornellà-El Prat (1-3) permitiría al Girona sumar tres puntos de oro en un partido donde Rubi tendrá tres bajas seguras. Serán las del capitán David López, lesionado de larga duración, Facundo Ferreyra, uno de los otros de los refuerzos invernales, y Pablo Piatti. Los tres se recuperan de diversos problemas físicos y no podrán viajar.
