Con cuatro victorias en los últimos cinco partidos y la posibilidad, de nuevo, de encadenar tres triunfos consecutivos desde el 2018, el Girona visitará este domingo (21h.) el estadio del Almería. Tras quedar cuarto la pasada temporada y de caer en las semifinales del play-off contra el mismo Girona, los andaluces se han propuesto volver a luchar por el ascenso. El inicio pero, no ha sido el mejor, aunque han ido de menos a más. Decimocuartos en la clasificación con dos puntos menos que los gerundenses, diez, y los mismos partidos, los andaluces llegarán a la cita habiendo encadenado dos victorias y siete de los últimos nueve puntos después de hacer sólo cuatro de los primeros doce y de enlazar tres derrotas consecutivas. La última jornada se impusieron al Castellón por 1-2 y ya habían comenzado con buen pie la semana goleando al Fuenlabrada por 3-0 en su estadio. José Corpas ha sido el gran protagonista de los últimos días con cuatro goles en dos partidos que la han subido hasta el primer lugar de la tabla de goleadora de un equipo que ha marcado seis de los ocho goles que acumula en las últimas tres jornadas tras enlazar hasta cuatro de las primeras cinco sin ver portería.
José Gomes lidera desde el banquillo el ambicioso proyecto del Almería. El técnico portugués, con bagaje en el fútbol de Portugal, Arabia Saudita y Emiratos Árabes, llegó expresamente para las semifinales del play-off de la temporada pasada contra el Girona pero no pudo alcanzar el objetivo. Este verano el conjunto andaluz ha hecho una apuesta por reforzar la plantilla con jugadores jóvenes con proyección que han complementado la base del año pasado. Bajo la batuta de Gomes los almerienses se organizan a partir del 4-3-2-1 y optan por el juego asociativo y de posesión. A partir de salir con el balón jugado desde atrás, tarea en la que cobra mucha importancia el joven pívot Samú Costa, encuentran en la movilidad y el talento de Villalba, Corpas y João Carvalho la posibilidad de generar peligro cuando consiguen conectar y Sadiq es la referencia en el área. Los rojiblancos acumulan mucha gente por delante del balón y tienen en el juego interior su fuerte. Ager Aketxe, Juan Villar o Lazo son otros de los nombres propios de un equipo que este verano ha perdido también a su máximo anotador, Darwin Núñez, que había conseguido dieciséis goles, pero que ha compensado las dificultades iniciales para encontrar el camino de la portería rival con una solidez que lo ha convertido en el cuarto menos goleado (6) sólo por detrás de los tres primeros clasificados.
El Girona visitará el domingo a un equipo contra el que el histórico de resultados no le es nada favorable pero al que, en cambio, ha conseguido batir en los últimos tres encuentros. Las dos victorias en Montilivi post-confinamiento en liga y ida de play-off fueron las primeras contra los de Gomes, que en los once partidos anteriores siempre habían puntuado, mientras que el triunfo por 1-2 en el Juegos Mediterráneos en la vuelta supuso también estrenar el casillero de victorias en tierras andaluzas, donde los catalanes sólo habían conseguido dos empates en las seis visitas anteriores. El Girona ha ganado siempre al conjunto almeriense desde la llegada de Francisco, que debutó en los banquillos profesionales de la mano del próximo rival y que posteriormente sólo ha cedido una derrota y un empate en las siete ocasiones que se ha enfrentado dirigiendo el UCAM Murcia, el Lugo y al Girona.
